¿Quién no ha disfrutado de una taza de café?
Ya sea en el desayuno, en el trabajo o en una charla con amigos o en muchos otros ámbitos. Creo que de una u otra forma todos en algún momento hemos caído rendidos bajo el encanto de un café recién hecho, atraídos por su irresistible aroma, o porque estamos agobiados en el trabajo y necesitamos una pausa que nos renueve energías, o tal vez por el simple placer que nos da beber café.
Beberlo está al alcance de todos, sin duda, pero prepararlo bien no es que sea difícil, el reparo está en saber los pequeños detalles que harán la diferencia al momento de probarlo.
Para empezar debemos saber la importancia de usar agua de buena calidad, para que no altere el sabor natural del café ni el olor, de ser posible, es preferible no usar agua de grifo ya que puede saber a cloro o flúor que viene agregado en el agua de cañerías y algunas veces en exceso. En ese caso lo ideal sería usarla filtrada, pero igual siempre es mejor el agua embotellada.
En cuanto al café va a depender mucho de nuestro gusto, conocimiento y de que presupuesto destinemos al momento de comprar el café. Obviamente también de la marca que vayamos a elegir cuando lo compremos. Porque de todo ese conjunto de condiciones dependerá el tipo de café a usar, ya que existen muchos, muchas marcas, muchos orígenes, etc.
El sabor de todo café va a depender de muchos factores: de donde se cosechó, el tipo de grano (Arábica o Robusta), el secado, el tostado, el tiempo que lleva de tostado o de molido, si no es en granos, ya que cuanto menos tiempo pase desde que fue tostado y de que sea molido o no y que cuanto más fresco sea mejor sabor tendrá. También de su envasado y conservación dependerá que mantenga por más tiempo su sabor y aroma.
Ahora que hemos hablado de los ingredientes principales para la preparación veamos como prepararlo.
Cómo preparar café
Comencemos con la temperatura del agua, es importante que no esté hirviendo, debemos hacerla hervir y luego apagar y esperar un momento a que baje unos 5ºC o 10ºC para que se encuentre a la temperatura ideal entre 90ºC y 95ºC para obtener el mejor resultado no quemando el café con el agua y evitando así cambiar su sabor.
El filtro de papel es importante humedecerlo antes de agregar el café molido, para evitar así también la posibilidad de que nada cambie el sabor original del café.
En cuanto al café, la cantidad va a depender del gusto de quien lo prepare, lo mejor sería molerlo en el momento que se va a consumir, ya que tú lo puedes comprobar por ti mismo si tienes uno o si te decides a comprar un molinillo de café para usarlo a tu gusto, con las diferentes medidas para ir probando y que sea en el momento de hacer tu preparación favorita. Sabiendo que de esta forma te aseguras un café más sabroso.
Como base y de referencia para ti, te puedo decir que para preparar un café suave, con unos 7 gramos (una cucharada al ras) por taza de 100 ml. de agua es suficiente. De tu paladar o de quien te acompaña en este momento dependerá que si lo deseas más fuerte agregues más café a esta relación café-agua que acabo de darte.
Otro detalle importante es el grosor de la molienda del café, si el café está molido fino será más fuerte, es también aquí donde deberás aprender que tipo de molido prefieres según el café que estés usando, en mi caso me gusta experimentar con diferentes cafés de diferentes orígenes y los voy probando y adaptando a mi gusto.
También depende de tu cafetera y la manera de prepararlo ya que según el tiempo que transcurre mientras el agua pasa por el café ya sea éste, mayor o menor, el café irá variando su sabor, ya iremos hablando más adelante sobre cafeteras.
A tener en cuenta también, conviene de ser posible tanto moler el café si fuese el caso, como prepararlo en la cantidad justa, ya que lo mejor es tomarlo recién hecho para así disfrutarlo de la mejor manera, pues además del gusto de tomar un café bien preparado y muy sabroso con estos consejos, nos beneficiaremos de todas sus propiedades, las cuales junto con el aroma y sabor se van perdiendo con el transcurrir del tiempo de preparada la infusión.
En este vídeo puedes ver un ejemplo de lo explicado, en este caso hecho con una cafetera chemex:
Cómo conservar el café en las mejores condiciones
En el caso del café preparado como dijimos recién lo mejor es hacer lo justo y consumirlo en el momento, pero de ser necesario que lo guardes deberías hacerlo en un recipiente térmico, ya que recalentarlo (aunque intentes hacerlo en el microondas) o dejarlo reposado en la cafetera hará que pierda sus propiedades, lo mismo ocurre con su aroma y sabor.
La conservación del café debe ser en un lugar fresco y seco, lo importante es que no tome aire, lo mismo ocurre con la humedad y el calor, estos factores deterioran de manera irreversible las propiedades, aroma y sabor de este producto.
Al decir lugar fresco no es que lo guardes en el frigorífico, porque allí tomará humedad, no importa de que forma lo envases nunca debes ponerlo en el frigorífico. Por lo general el envasado que trae cuando lo compramos es suficientemente bueno, ya que viene preparado para evitar que lo afecten estos problemas.
Con que conserves su envase original, lo cierres bien para que no tome aire, y lo guardes en un lugar fresco y seco, ya con eso te aseguras las buenas condiciones de conservación. Mejor aún si también lo pones dentro de un bote hermético. Y listo ya puedes seguir tomando un rico café.
Cafés que nosotros recomendamos en Taza de Café
Si quieres comprar un buen café para prepararlo de la mejor manera ahora que has leído este artículo, aquí puedes hacerlo, te sugerimos tres buenos cafés.
Entrando a cada reseña verás por qué debes probarlos, te brindamos información de cada uno de ellos, sus propiedades y virtudes más destacadas.
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Te aseguro que después de probarlos ¡querrás seguir consumiéndolos! 😉